Recordando a mis adorados Taurus y Tango
(PS: escrito en el año 2016 después de la muerte de Taurus)
La bendición mas grande que tuve en mi vida fue tener a mi madre y a mis dos perros: Taurus y Tango.
En esta sección describo el gran amor de mis adorados perros Taurus y Tango, los seres vivos, que junto a mi madre, son las Almas que mas Amor me han dado en mi vida y las que mas amé en mi vida.
Me han acompañado muchos animales a lo largo de mi vida, y estos dos hermanos de la hermosa raza Golden Retriever han sido los animales mas extraordinarios que tuve en mi vida. Mis perros eran absolutamente hermosos, tanto en cuerpo como en alma, eran tan buenos como un cordero de Dios, eran muy inteligentes, totalmente obedientes, me entendían todo lo que yo les decía, siempre estaban todo el tiempo atentos a mis acciones, y lo único que me daban mis compañeros de vida era su gran amor y total alegría para consolar mi sufrimiento y darme la felicidad que mi Alma necesitaba.
Recuerdo con mucho amor a todos mis queridas mascotas que tuve en mi vida, mis adorables perros y mis adorables gatos, que me acompañaron con su amor los primeros años de mi vida: el primer perro que tuve a los 5 años fue un Ovejero Alemán llamado Lord; el siguiente perro que tuve a los 10 años fue un Irish Setter dorado llamado Oliver; después vino el Bóxer llamado Bosco, acompañado después por otros dos Bóxers, llamados Felix y Tigre; y después vino el Ovejero Alemán que me lo regalaron con el nombre Kasim, y éste tuvo un hijo que quedó bajo el cuidado de mis padres, cuando me fui a USA para obtener mi doctorado: este muy divino Ovejero Alemán se llamaba Wolfi y murió a los 15 años (fotos). Muchos años después, cuando volví de USA y Europa al Uruguay para cuidar de mis enfermos padres, pude volver a tener un perro, y pronto aparecieron los dos preciosos Golden Retriever: mis adorados Taurus y Tango, que con la experiencia y sabiduría que me dieron los años en la vida, pude apreciar mucho mejor que mis perros eran la mayor bendición de mi vida.
Taurus y Tango habían nacido el 15 de febrero del 2002 de una divina hermosa gran campeona brasilera llamada Molly. Adjunto algunas fotos de mis divinos cachorros Golden Retriever.
Tango falleció el 31 de julio del 2008, por una infección viral muy mal manejada por ciertos irresponsables veterinarios (abajo); Taurus se recuperó de esta infección, y sobrevivió 8 años mas, hasta los 14 años de edad. Taurus falleció en la mañana del 10 de marzo del 2016, ya había cumplido 14 años; el principio del fin de su vida ocurrió en la noche del 9 de marzo, en el día del cumpleaños de mi madre (abajo). Así, durante 14 años lo tuve a Taurus, durante los primeros 6 años tuve a los dos hermanos Taurus y Tango, y los últimos 8 años estuve solo con Taurus. Ambos perros están enterrados en el lugar mas sagrado de mi Santuario Abba-Ama, al lado de mi Capilla de los Ángeles.
Todos los días me deleito viendo la imagen de mis hermosos adorados perros, pues tengo ambos amores en mis preferidas fotos sobre mi escritorio donde me paso horas escribiendo en la computadora. Además, imprimí las mejores fotos de las muchas cientos de fotos que tengo de mis adorados perros para colocar en un álbum muy especial dedicado tan solo a estos adorables hermosos animales.
Los años mas felices de mi vida los pasé durante los 6 años que conviví con mis dos adorados perros: mis adorados santos ángeles perros, que con mi madre, es lo mejor que me pasó en mi vida. El Amor que me han dado estos perros es el mas Perfecto Absoluto Amor que un ser vivo puede recibir: es como el amor que da una madre a un hijo recién nacido, como lo describo con mis letras en mi canción dedicada a mi madre (Mother).
Yo fui lo mas importante en la vida de mis dos perros, yo era el único gran amor de mis perros, yo era para mis perros mas importante que la vida misma; yo era para mis perros mas importante que su alimento; ciertamente, mis perros no comían cuando yo me tenía que ir unas horas al pueblo; yo era mas importante que el agua que necesitaban mis perros en sus vidas: mis perros no tomaban agua mientras yo no estaba con ellos; cuando yo me ausentaba unas cuantas horas para ir a un banco, mi empleado me contaba que Taurus yacía tirado triste en la puerta de mi casa, no se movía de su lugar, yacía triste en su lugar todo el tiempo, porque yo no estaba, yacía con una mirada triste porque le faltaba mi presencia por tan solo unas pocas horas. Cuando yo volvía al santuario, desde el auto, ya de lejos, lo buscaba y aliviado enseguida lo veía a Taurus, que se levantaba de donde yacía en la puerta, y movía su cola de contento, estaba absolutamente contento, recuperaba su completa felicidad, porque yo había vuelto para estar junto a Taurus.
Taurus fue el gran amor de mi vida durante 14 largos años, y su hermano Tango lo fue también durante los primeros 6 años que nos acompañó con su amorosa presencia: Tango murió a los 6 años en uno de los episodios mas tristes de mi vida (abajo). Después de la muerte de Tango comenzaron mis problemas: me quedé sin plata por las enormes inversiones que había hecho en el Santuario de Animales, me había gastado toda mi pequeña fortuna de 1,000,000 U$S para embellecer la flora y la fauna del campo, y especialmente para cuidar de los muchos cientos de animales de muchas especies diferentes que cuidé durante muchos años en el santuario (OC). Por la falta de dinero tuve que tomar enormes préstamos, durante los siguientes 7 años, y perdí fortunas con idólatras prestamistas millonarios, con corruptos abogados, con escribanos, y muchos otros que se aprovecharon de mi vulnerabilidad por falta de plata, y me robaron lo que podían de mi fortuna (OC). Taurus me desintoxicaba el veneno que constantemente recibía de inmorales usureros y por los problemas con los delincuentes vecinos que mataban a mis animales; Taurus me neutralizaba el odio que acumulaba por los perversos humanos, con el amor que mi ángel perro siempre me entregaba. Taurus era la perfecta Energía de Amor, era la total Energía de Alegría, la completa Energía de Felicidad, que todo el tiempo me consolaba y alegraba la tristeza de mi alma provocada por el corrupto factor humano. Taurus era mi Ángel Guardián, mi Ángel de Amor, mi Ángel de Alegría, mi Ángel de Felicidad. Taurus y Tango eran ambos un Ángel del Cielo que jamás cometieron una falta contra mi persona; todo era amor, cariño, alegría y felicidad. Taurus siempre fue totalmente feliz en su vida, lo único que necesitaba era tenerme a su lado; Tango era a veces un poco mas melancólico, quizás porque sabía que se tenía que ir antes de tiempo; así lo muestra la preciosa foto un tanto melancólica de Tango que tengo en mi escritorio para ver todos los días.
Taurus era un Espíritu de Purificación pues me purificaba el Alma que constantemente era contaminado por la polución de la maldad humana. Taurus era un Ser Iluminado, mucha gente, que amaba los animales, me lo había dicho muchas veces, y mismo por escrito; ciertamente, un día, un visitante a mi santuario me sacó una foto junto a Taurus en uno de los lugares mas sagrados del santuario, en el Cerro de la Cruz, junto a la cruz, desde donde hay una de las mas lindas vistas del santuario; y cuando me mandó la mística fotografía, decía el título de su email: ‘Taurus y Roberto iluminados!’ Ciertamente, estábamos Iluminados por la Gracia del Espíritu Santo, con la Luz del Sol, con la Manifestación de un Corazón de Luz en el Cielo Azul del Santuario, el Símbolo del Amor que manifestaba siempre este maravilloso Ser Iluminado que era mi Ángel Taurus. Después de recibir el a mail con la mística foto subí a la cruz para sacar otra foto, y hete aquí, una simbólica Cruz de Luz se manifestó en la foto milagrosa en la Cruz de San Taurus.
Tango tuvo una excelente salud, salvo alguna ocasional alergia en la piel, hasta el día en que se infectó con un virus que le causó la muerte en 3 semanas. Taurus siempre tuvo una excelente salud excepto por su gran alergia de la piel, tan común en los Golden; al ponerse mas viejo tuvo algún problema de sensibilidad en el hígado durante unos 2 años cuando comía algo malo del campo, y curiosamente este problema desapareció 3 años antes de su muerte; los problemas de piel siguieron, y al cumplir los 13 años llegó un problema de cáncer, que se extendió de a poco durante meses por todo el cuerpo, mostrando unos pequeños bultos en la piel, pero el cáncer eventualmente llegó a los pulmones, pero sin causar síntomas en su respiración hasta el último día de su muerte. Aunque ya tenía 14 años, una edad muy avanzada para un Golden, mi Taurus murió hermoso como lo fue siempre, sin mancha alguna en el pelo de su cuerpo; Taurus murió bello como siempre, estaba gordo y en perfecto estado óseo, articular y muscular: nunca le falló la cadera, que es otro problema muy común en los Golden; mi Taurus caminó perfecto toda su vida, hasta los 14 años de edad; ciertamente, Taurus nadó y salió caminando del agua, con las olas del mar, con su pelota en la boca, unas pocas horas antes de su muerte, el mismo 9 de marzo, cuando al final del día decidió que era tiempo de partir hacia otro mundo espiritual.
Siempre estuve junto con éstos dos adorados perros: no me separé un solo día de mis perros, ni siquiera me separé 1 sola noche, pues siempre estuvimos juntos; los primeros 5 años vivimos en la casa de mis padres en Punta del Este, y al fallecer mi padre en el año 2006, nos mudamos en el 2007 al Santuario. Un año mas tarde fallecía Tango (abajo). Los últimos 8 años, desde los 6 años hasta los 14, viví con Taurus en mi Santuario, y jamás me separé de Taurus: lo llevaba a todas partes, incluso lo llevé a Montevideo para firmar documentos con los abogados, lo llevaba al juzgado cuando tenía que ir a declarar ante la jueza por los delitos de mis vecinos; lo llevaba conmigo a todos lados, a veces me esperaba descansando en el auto cuando hacía alguna compra; la última visita al dentista, como no me lo dejaban entrar en el consultorio, lo dejé atado enfrente del consultorio en la policía, y cuando el dentista tardó algo mas de lo esperado, decidí irme, me escapé del dentista después de esperar 25 minutos en el consultorio, y contento me fui a buscar a Taurus para llevarlo a casa; cuando llego a la policía, le habían dejado un balde con agua, pero no había tomado nada; cuando llegué a buscarlo, Taurus enseguida se levantó y tomó mucha agua del balde: este era mi perro, que cuando yo no estaba, no comía y no tomaba nada, y recién cuando yo llegaba, solo entonces se sentía bien y tomaba su agua.
Muchas veces Taurus me traía a los conejitos muertos que encontraba de una mala parición reciente, me los traía con un cuidado absoluto, sin dañar la frágil piel del conejito recién nacido; se parecía a una madre cocodrilo que llevaba a sus pequeños entre los grandes colmillos sin causarles daño. Taurus nunca se peleó con otro perro salvo cuando se tuvo que defender 5 veces del ataque de perros malos agresivos que eran mucho mas grandes que él; los histéricos perros de razas pequeñas que lo atacaban, e incluso a veces un poco lo mordían, Taurus ni bola les daba: los miraba como diciendo no seas malo y no molestes; Taurus jamás agredió a otro perro; tres veces tuve que intervenir para sacar a otros perros grandes agresivos de dueños desalmados malvados que no cuidaban a sus perros; una vez quedé con sangre en la mano cuando tuve que abrir los dientes a uno de estos que de golpe lo habían atacado desde atrás cobardemente; los agresivos perros jamás pudieron lastimar a Taurus, y nunca le ganaron una pelea estos perros muchos mas grandes y jóvenes que atacaron a Taurus incluso teniendo una muy avanzada edad. Los malditos dueños de los agresivos perros recibieron un duro escarmiento: a uno no le permitieron bajar mas a la playa por lo peligroso que era su perro.
Taurus me presentaba a todo el mundo en la playa, porque Taurus era el perro mas lindo del mundo, y encima era un ángel de bueno, todo el mundo lo quería tocar, y todos me venían a hablar. Recuerdo que fui 3 veces a ver las exposiciones de perros del Kennel Club, y miraba a los lindos Golden Retriever, y siempre pensaba que Taurus era aún mas lindo, para mi Taurus es uno de los perros mas lindos del mundo.
Mi social en la playa era Taurus y gracias a Taurus conocí a mucha gente muy buena: la gente buena son los que aman a los animales. Taurus era famoso en todas las playas: al caminar entre la gente yo veía que Taurus hacía sonreír de felicidad a la gente que amaba a los animales: esto era una constante, ver como la gente sonreía de felicidad cuando Taurus pasaba cerca de la gente; y los pequeños niños también lo adoraban, se acercaban y lo tocaban, muchos les daban besos en la cabeza, y otros se querían subir sobre el lomo de Taurus que se dejaba hacer todo lo que querían hacer los niños de la playa. Este era San Taurus!
Como Taurus vivió mucho mas años que Tango, tuve muchas mas experiencias con Taurus que con Tango, y aquí presento otras experiencias místicas que tuve con Taurus:
Hace unos años atrás me operaron de una hernia en el hospital del pueblo; fue una operación con anestesia general en el hospital público de San Carlos. Temprano a las 7 de la mañana me fui con el auto al hospital, dejando encerrado a Taurus en el cuarto de mi hogar en el santuario; dejé a un empleado vecino para cuidar de Taurus y a todos los otros animales del santuario. Una hora después de salir del quirófano, a eso de las 8:30, y estando en la cama del hospital, con dolor por la cirugía abdominal, me llama el vecino de un vecino al celular, y me dice que vio pasar a Taurus en el camino vecinal, yendo hacia la ruta, para buscarme en el pueblo en el hospital. No se como hizo Taurus para salir del cuarto, seguro que abrió la ventana, que yo había dejado un poco entre abierta, y así se escapó de las casas, para venir a buscarme al hospital. Taurus había hecho 2 km para salir de mi campo, pasando por 6 porteras, o por el alambrado de los 6 potreros que eran a prueba de perros y cabras; además, Taurus cruzó el campo del primer vecino que tenía una jauría de 17 perros adiestrados para matar, por suerte no hubo problemas con los perros de este vecino; y Taurus después recorrió varios kilómetros más, dirigiéndose hacia la peligrosa ruta para buscarme en el pueblo en el hospital. Cuando me llama el vecino yo estaba en la cama del hospital, saliendo de la anestesia, canalizado con suero en la vena, y de inmediato le dije al vecino que urgente buscara mi jeep, y fuera a buscar a Taurus, pues Taurus subiría a mi jeep, para así llevarlo rápido a la seguridad de mi casa; y le dije al vecino que me llamara de inmediato al encontrarlo, de lo contrario me sacaba el suero de la vena y me iba a buscar a Taurus para llevarlo yo mismo a la seguridad de nuestro hogar. A los 15 minutos me llama el vecino y me dice que ya tenía a Taurus en el auto; cuán aliviado estaba al escuchar esta noticia, y pronto llevó a Taurus con el jeep a mi casa, y lo ató con una soga, para que no se escapara nuevamente para buscarme en el hospital. A las pocas horas de esta peligrosa pesadilla, decidí irme urgente a casa, necesitaba estar junto a Taurus, y así decidí escaparme del hospital. Con mucho cuidado me saqué el catéter con el suero endovenoso, salí del hospital, y me vine a casa manejando solo en mi auto, con mucho dolor pues habían pasado pocas horas después de una operación abdominal con anestesia general; lo importante para mi era la seguridad física y emocional de Taurus. Al llegar al campo Taurus me estaba esperando, y otros animales también, una gallina se subió sobre mi cuerpo, y los gastos me dieron sus masajes terapéuticos en mi abdomen, que con mucho cuidado tuve que controlar. Todo fue una locura, como mismo me lo dijo el muy enojado médico mas tarde, pero por suerte aún estoy bien con la hernia, y sigo levantando a mis pesados animales para cuidarlos en mi hogar. Taurus el Iluminado sabía que algo malo me estaba pasando; ciertamente, yo estaba con angustia y con dolor por la operación de la hernia, y con su Alma-Espíritu conectada con mi Alma-Espíritu, a través de la Dimensión Espiritual, muy rápido salió a buscarme, y me iba a encontrar, porque sabía donde estaba mi Alma, a través de la Conciencia Cósmica Espiritual!
Una tarde los delincuentes de mis vecinos le prendieron fuego a mi montaña (OC). Al ver el humo en mi montaña, dejé bien encerrado a Taurus en las casas, y urgente subí angustiado a la montaña con el jeep, para apagar el fuego. Las llamas ardían por todos lados, y pronto tuve que llamar a los bomberos y 2 horas mas tarde aparecieron 6 bomberos con 3 policías que me ayudaron a apagar el fuego; una tremenda pesadilla que nunca me voy a olvidar. En 6 horas apagamos el fuego, a las 12 de la noche, que gracias a un rocío que cayó, y un viento que sopló del lado adecuado, nos ayudó a contener el fuego. Los malditos vecinos me quemaron unas 20 hectáreas de mi campo; yo luché durante horas en la línea de fuego que amenazaba el gran palmar; las primeras 2 horas totalmente solo, sin ayuda, vestido con un traje de baño porque era verano, y con mis sandalias de playa, caminando entre las piedras y las duras espinas a través del fuego, y controlé el terrible fuego, casi desnudo con una toalla, una toalla milagrosa, que me ayudó a destruir ‘el trabajo’ de los malditos delincuentes vecinos que se dedican a destruir y matar (OC). Este fuego fue otra de las grandes pesadillas de mi vida que nunca me voy a olvidar (OC). Después de que se fueran los bomberos, después de las 12 de la noche, bajé de la montaña a las casas para ver a mi Taurus, que al verme, estaba en un trance de alegría, nunca lo vi a Taurus tan excitado en su vida, estaba en un delirio de alegría. Me sorprendió ver el extremo estado de excitación emocional que sufría, jamás lo había visto tan estresado en su vida, estaba acidótico y jadeaba como si hubiera corrido una maratón de 100 kilómetros de distancia, tenía saliva en su boca, estaba deshidratado como nunca antes había estado en su vida. Fuimos a la cocina a tomar agua; yo estaba totalmente deshidratado por las 8 horas que había pasado en el fuego apagando con una toalla el incendio en la montaña; estaba sediento de sed como nunca antes había estado en mi vida; pero Taurus estaba mucho mas sediento que yo, Taurus necesitaba el agua bendita mucha mas que yo, y pronto el primero que tomó agua fue Taurus, el amor mío que no tomó el agua que le había dejado en la casa, cuando quedó encerrado, mi adorado me esperó hasta que yo volviera de ese infierno sin agua, para tomar el agua de la vida. El fuego en la montaña no se veía de las casas, así que Taurus sabía a través de la Conciencia Cósmica Canina que yo estaba en un grave problema (el terrible fuego); Taurus sentía mi sufrimiento emocional, y por eso el perro sufría tanto emocionalmente, y le hacía falta el agua que a mi tanto me faltaba. Nunca voy a olvidar este Encuentro de Amor con mi Santo Perro cuando bajé de la montaña tras apagar el horrible fuego. La Naturaleza Santa con su roció y su apacible viento me salvó de un terrible desastre ecológico con la posible perdida de mi gran palmar. Una vez en casa, recuperé otra vez mi vida, con el gran Amor de Taurus, que otra vez me consolaba y amaba con su Puro Amor Incondicional!
Un día subíamos con Taurus a pié por la montaña para explorar la Santa Naturaleza de mi magnífico Santuario. El perro se había adelantado en el camino, olfateando todo lo que había para olfatear, y pronto escucho un fuerte galope, un gran animal venía corriendo hacia abajo de la montaña, hacia mi, y segundos mas tarde, vi un enorme jabalí, que bajaba corriendo a mil por hora, pasándome a solo 3 metros de distancia desde donde yo me había quedado parado, para ver y escuchar y entender el gran ruido de galope que venía bajando de la montaña. Pronto atrás venía corriendo Taurus, detrás del jabalí, muy atrás, porque el jabalí le había sacado 100 metros de distancia. Taurus siguió corriendo hacia abajo detrás del jabalí que se perdió en el monte; yo llamaba a Taurus, a viva voz, para que venga pronto, y que no se meta con el gran jabalí, porque éste lo podría haber destruido en mil pedazos con sus colmillos en la tierra de su montaña. Como yo sabía que Taurus jamás alcanzaría al jabalí, seguí subiendo unos metros mas por la montaña, y a los pocos metros de mi encuentro con el gran jabalí, de pronto me salen de un arbusto 6 pequeños jabalitos, que salieron corriendo hacia abajo, hacia el monte donde había corrido la madre. Así, me di cuenta que la madre jabalí había decidido alejar al perro de su cría, para proteger a sus jabalitos, llevando al perro hacia abajo en la montaña. Tuve varios encuentros cercanos con estos magníficos animales los jabalíes (foto). Tengo un video donde me filmaron con un jabalí macho salvaje que comía junto a los pequeños carpinchos de mi sanitario (video). También estuve a metros de un pequeño jabalí blanco, que debe ser un muy inusual albino, un pequeño que con su madre y hermanitos venían a comer cerca de casa (fotos). Es un horror lo que esta pasando en el campo con la matanza de perros y jabalíes por culpa de la maldita caza del pervertido maldito hombre, que con su extrema violencia mata cobardemente animales con sus armas de fuego, y entrena a sus perros a matar todo lo que tenga 2 y 4 patas, exterminando a toda la fauna del país (OC). Los jabalíes jamás me han matado un cordero u otro animal desde que yo vivo en mi campo. Yo amo y respeto y protejo a los jabalíes de mi campo y así los jabalíes me respetan y nunca me han tocado un animal. Los jabalíes vienen casi todas las noches a metros de donde yo duermo, y a metros de mis ovejas, para osar el pasto y comer sus hierbas del campo (foto). Los jabalíes tienen Alma como los humanos y deben respetarse y se los debe dejar vivir, pues tienen el mismo derecho a la vida que tienen los seres humanos. Nunca me voy a olvidar que esa Madre Jabalí no me lastimó a Taurus para defender a su pequeña cría, pues con sus grandes colmillos me lo podría haber destrozado y así yo hubiera quedado destrozado de por vida. Gracias Amor Naturaleza Santa por la Sabiduría de Amor y la Gracia Recibida. Y mi Tauritus, jamás hubiera lastimado a los pequeños jabalitos, pues tan solo le gustaba correr y jugar con todos los otros animalitos!
Taurus jamás hizo daño alguno en su vida; jamás hizo daño a un animal, corrió detrás de algún ciervo en el campo, o algún jabalí, pero nunca lastimó a nada, ni siquiera a una paloma, ni a un ratón, que pasaba enfrente suyo. Las gallinas lo amaban, venían a casa y se sentaban junto a Taurus (foto). También se subían sobre su lomo, donde se sentían sanas y salvas.
Tanto Taurus como Tango eran adorados por los gatos: los gatos amaban a los perros mas que a mi, así lo demostraban todo el tiempo, como lo muestran varias fotos de los perros con los gatos sobres sus lomos (fotos). Cuando ambos perros fallecieron los gatos comenzaron a estar mas conmigo y a demostrar mas amor, y comenzaron a dormir junto a mi en mi cama.
Aquí van algunas fotos de mi absolutamente hermoso divino cachorro Taurus.
Varios gatos me acompañaron en mi vida; los gatos son también unos seres vivo divinos que han acompañado al hombre desde hace miles de años; ciertamente, los gatos han sido considerados deidades por la antigua y sabia cultura milenaria de los egipcios. Mushita fue mi adorada gata que me acompaño los primeros 2 años en Punta del Este; la mató un incompetente veterinario durante la simple cirugía de una castración. La foto muestra a mi Santa Mushita con sus ‘ojos de luz’ que demuestran la manifestación de Corazones de Luz para establecer el Amor de Luz que me entregaba esta Santa Gata. Santa Mushita esta enterrada junto a Taurus y Tango a lado de la Capilla de los Ángeles de mi Santuario.
Junto a Santa Mushita se encuentra también enterrado mi adorado Bilito que me acompaño 15 años como el principal gato del Santuario. Bilito dormía todas las noches conmigo, se acostaba sobre mi pecho, sobre mi corazón, y cuando hacía frío, se arrollaba y acurrucaba alrededor de mi cuello, me daba su calor y su amor y yo era consolado, y dormía en la paz del amor de San Bilito. Cuando Bilito tenía 15 años comenzó a sufrir de un cáncer terminal en su maxilar, lo curamos con el veterinario, con anestesia general le sacamos un colmillo flojo y un poco de hueso con cáncer, pero el cáncer siguió creciendo y durante los próximos 3 meses se incrementó su dificultad para comer; lo cuidé con mucho cariño, le daba todo lo mejor para comer, atún y la pasta mas rica, pero al final muchas veces le entraba la comida en la traquea, y cuando dejó de comer, ese fue el momento en que tuve que tomar la terrible decisión de terminar con el sufrimiento de mi Adorado Bilito. Este fue otro duro golpe para mi frágil estado emocional y lloré mucho por la partida de mi San Bilito.
Bilito es el padre de mis otros gatos: Tigrito, Blanquito, Marita y Mimita (fotos). Grisita un día de lluvia apareció en mi santuario, seguro se escapó de algún irresponsable falto de amor vecino, y al ver el amor que había en mi santuario, se quedó para siempre con los otros gatos (foto). Tigrito adoptó las lindas costumbres de su padre, y duerme conmigo, y me ayuda a dormir durante el insomnio que sufro por causa del factor humano. Así, mis gatos son también una gran bendición en mi vida, y los gatos desamparados que son abandonados en la calle son también parte de mi lucha para aliviar el sufrimiento de todos los animales (abajo).
Pocos meses antes de la muerte de Bilito lo tuve que llevar al veterinario, para sacarle con anestesia general un colmillo que se le estaba saliendo, y rasparle el hueso maxilar, porque sufría de un cáncer que lentamente le estaba comiendo el maxilar. Cuando volvimos al santuario lo bajé del auto, y estando ya bastante despierto Bilito salió corriendo, hacia la selva de arbustos de las casas, para esconderse entre los matorrales. Bilito estaba asustado y enojado conmigo porque lo había llevado en un auto (era su primera vez en su vida) a un veterinario (primera vez en su vida) que lo pinchó y causó un dolor de tortura. Llamé a Bilito para que viniera, pero no venía, lo busqué una hora en el matorral, para traerlo y cuidarlo en casa, porque aún estaba bajo los efectos de la anestesia general. Tenía que cuidarlo pero Bilito no aparecía, no volvía a casa, se había escondido, pues Bilito estaba enojado conmigo! A la noche no había vuelto a casa, aún estaba en la selva escondido, y enojado conmigo. Me fui a dormir preocupado sin Bilito. A la 1:30 de la mañana, me despierta un Angelito de Dios, cuando siento que un pequeño angelito muy peludo acariciaba mi cuello, y mi Alma: era Bilito! Se había acurrucado conmigo en la cama, arrollando todo su cuerpo alrededor de mi cuello! Adorado Bilito no podía estar mas cerca de mi cuerpo y mi Alma, para darme su Amor, estaba arrollado alrededor de mi cuello, mientras me acariciaba, y ronroneando me cantaba, con el canto mas lindo de gato que jamás había escuchado en mi vida! Bilito me había perdonado, otra vez me amaba, y acariciaba con su cuerpo mi Alma, con su amoroso canto de gato que nunca jamas me voy a olvidar en mi vida! Pronto seguí durmiendo con mi angelito peludito abrazado a mi cuello! Pocos meses mas tarde Bilito no quiso comer mas, ni el suave atún, ni el mejor paté ya comía, tampoco tomaba mas leche; se estaba muriendo, por el cancer del maxilar; ya sufría por el cáncer, pronto se iba a morir, no comía mas, y un día se plantó, y dijo basta; hasta aquí llegué; y me tocó lo peor, tuve que ayudar a Bilito a que volviera al Cielo: así, en 3 segundos, sin dolor y sin que se diese cuenta, con mi pistola 22 le tiré 4 tiros en el cerebro: en 2 segundos Bilito estaba en el Cielo. Quedé con una profunda depresión, pero con el consuelo que mi Adorado Bilito había convivido conmigo casi 17 años! Lo enterré junto a mi Adorado Tango, a metros de la Capilla de los Ángeles, en el lugar mas importante y Sagrado de mi Santuario, con la mas linda vista, en donde meses mas tarde, lo enterraba a mi Adorado Taurus.
La partida de Tango
Mi vida es y ha sido una vida de sufrimiento y soledad y padezco de un síndrome de depresión familiar (OC). Mi querida madre murió en mis brazos hace unos 6 años atrás, en un a terrible muerte de la cual jamás me podré recuperar (sección X). Mi querido padre murió en mis brazos un año atrás, en otra muerte de la cual jamás me podré recuperar, una muerte que también fue otro Mensaje de Dios para la evolución de la humanidad (OC). Mis dos hermanos viven un poco alejados de mi en otro mundo de negocios, y mis primos hermanos no son mas mis primos, ya que robaron, con sus padres, la gran fortuna de mi madre, en lo que fue para mi otra triste gran tragedia familiar (OC). Dios me dejo soltero, sin una mujer para compartir mi vida, y entonces tampoco tengo hijos, por lo cual padezco de una constante soledad. La falta de un normal frecuente contacto humano la mitigo con mi trabajo en mi Santuario, con el constante contacto con mis queridas plantas, y en especial con mi relación con todos mis queridos animales, que me llenan el Alma de alegrías y felicidad. Las dos Almas mas preciosas que me acompañan en mi vida son mis 2 hermosos adorados divinos perros: mi adorado Taurus y mi adorado Tango (Foto). San Tango y San Taurus son la gran felicidad de mi vida, son los guardianes emocionales de mi sanidad mental, son los mejores amigos de mi Alma, son mi familia, mis niños, que amo con toda la fuerza de mi Corazón. Mis dos queridos perros duermen conmigo en mi cuarto, tomando turnos para dormir conmigo en mi cama, para darme su constante amor y calor en el crudo frío del invierno. Que emoción tan linda era ver a mis dos perros salir a recibirme en la portera de mi Santuario cuando llegaba de la ciudad con las compras, cada uno de mis adorados perros con una reliquia en su boca (una pantufla, una media o un guante mío), que me traían para demostrar su enorme alegría de verme otra vez, después de estar solos unas pocas horas durante mi ausencia. Mis dos perros eran el soporte emocional y alegría de mi Alma, el consuelo de mi soledad, el espíritu de mi felicidad, y uno de mis dos niños me fue arrebatado para siempre, para la gran tristeza de mi Alma.
Lo peor de mi vida fue la muerte de m madre, después la muerte de mi padre, y ahora describo la muerte de Tango. Desde la muerte de mi querida madre, y la muerte de mi querido padre, no había sufrido tanto, no había llorado tanto, como nunca en mi vida, por la perdida de esta Adorable Alma, que durante 6 años me ha acompañado en todas mis acciones, dándome una enorme alegría en mi vida, llenando de felicidad la soledad de mi Alma. Mi adorado Amor Tango falleció de una enfermedad viral el 31 de Julio del 2008 cuando tenía 6 años de edad. La muerte de mi adorado Tango fue producida por los errores del caos de la naturaleza y por los irresponsables errores humanos. Ciertamente, el desempeño de los varios veterinarios que visité desde el primer indicio de enfermedad, con el primer síntoma de una falta de apetito y falta de energía, fue un total desastre, pues entre otras, en estos lugares del mundo subdesarrollado de poca cultura y conciencia moral, los veterinarios, después de sus horarios de 8 horas de trabajo al día, no atienden sus teléfonos celulares, para ayudar en las emergencias, y mucho menos, se toman el esfuerzo de acudir al hogar del enfermo; así, por ejemplo, también perdí a mi muy querida llama Mimita, porque ‘el señor’ me mandó el problema un domingo, cuando los veterinarios no atienden las emergencias. Así, había llamado a muchos veterinarios para que me asistan en las emergencias de Tango, pero la mayoría no atendían sus teléfonos celulares, y el único que me atendió una noche me dijo: ‘pobrecito el perro se esta muriendo’, y nada hizo por el animal, ni siquiera me dio una sola sugerencia, y pronto este ‘profesional’ siguió durmiendo, y al día siguiente no me atendió al perro pues tenía una reunión que era mas importante que la vida de mi hijo que se estaba muriendo enfrente de mi desconsolada Alma. Muchas veces estuve solo en la noche dando suero por vía endovenosa, porque además, en este país subdesarrollado, no encontré un hospital de animales para una internación de animales muy enfermos. Todos los días, durante mas de una semana, tuve que llevar en brazos a mi pesado perro de casi 40 kilos, desde mi casa en el campo al veterinario, para hacer los tratamientos endovenosos necesarios. En las ultimas horas mas difíciles de Tango, cuando se encontraba entre la vida y la muerte, el veterinario de cabecera que lo atendía se mandó a mudar a una reunión, y no atendió a su paciente que se moría, para pasarle los esenciales sueros de la vida, y delegó este importante difícil trabajo a su empleado no calificado que solo se encarga de vender la ración de animales en su veterinaria; así, en este ultimo día de la vida de mi adorado Tango fui a otro veterinario, que le inició una nueva estrategia de medicación, y que después me di cuenta fue también totalmente errada, y unas horas mas tarde perdí a mi adorado Tango. Así, no solo tuve que experimentar, durante varios días, la terrible angustia de ver muy enfermo a mi querido amor Tango, sino también tuve que soportar la imbécil irresponsable inmoral actitud de pésimos mediocres veterinarios, y menciono aquí que los veterinarios de animales grandes son aún mucho peor, pues lo único que les interesa es hacer plata y ayudan a los productores de carne a matar inocentes animales en el matadero (sección X).
Las ultimas horas y agonía que sufrí con la muerte de Tanguito, mi adorado San Tango, mi mas preciado Amor Tango, me llevaron a una eventual crisis emocional de una profunda depresión, llena de llanto, por la perdida de lo que fue, con su hermano Taurus, mi mejor amigo, un hijo mío, un niño mío, mi bebe mío, era todo amor, era mi compañero de una feliz vida, un gran Amor del Alma. Para curar a Tango, tuve que sufrir la tortura de darle muchos dolorosos inyectables, y forzarle medicamentos por la boca, pero también tenia el placer de acostarme a su lado, en el piso, para abrazarlo, acariciarlo, adorarlo, para darle todo mi amor, para pasarle toda mi Energía de Amor, para curarlo en su cuerpo, y calmarle el Alma. Mi Tanguito respondía como siempre, con una respiración mas profunda demostrando su placer, y con su pata me acariciaba mi cuerpo, para demostrarme su afecto y la alegría de su Alma, mismo bajo la tortura de su dolor en su cuerpo y el sufrimiento del Alma. Yo le acariciaba con mis manos su abdomen, donde tenia su grave problema, por los vómitos y sus diarreas con sangre que padecía, y le rezaba a Dios, a Jesús, a la Virgen Maria, a mi Ángel Guardián, al Arcángel San Rafael, al Padre Pio, a San Francisco, a Santa Teresita, y mismo a mi madre que ya había partido y que adoraba a los perros; pero no hubo respuesta alguna, no hubo compasión, no hubo misericordia; hubo tan solo la nada, el silencio, el dolor, la angustia y la agonía de la muerte que se aproximaba. Realicé también intensas sesiones de ‘visualización’, para activar anticuerpos y macrófagos del enfermo perro, para destruir cualquier virus y bacteria, y mismo le pedí al virus que me deje en paz a mi San Tango, pues ningún beneficio sacaría el virus el matar a mi Perro. Pero nada funcionó, el destino estaba marcado, el ‘señor’ se lo iba a llevar, se había decidido que mi San Tango se iba a morir, mi Amor Tango iba partir, para que yo sufriera mas en mi vida, para que yo escriba este muy doloroso capitulo de mi vida. ¿Donde estas amor mío? Pronto te veré otra vez Alma Amor mío, en algún Cielo con Ángeles, para darme tu alegría y Amor Vida Mía!
El jueves 31 de Julio del 2008 llevé por ultima vez a mi Tango a un nuevo veterinario, que, por la perdida de sangre que sufría Tanguito, implementó transfusiones de suero y plasma. Después de la transfusión, yo me recosté una ultima vez al lado de mi Tanguito, para acariciarlo, amarlo y consolar el sufrimiento de su cuerpo y Alma. Esa fue la ultima vez que mi Tanguito, con gran esfuerzo, levantaba su pata para acariciar mi cuerpo y consolar mi Alma. Como no había internación para animales en esta otra veterinaria, me lleve a mi Tanguito a mi casa, para seguir dándole las infusiones endovenosas durante toda la noche, para volver el día siguiente a la veterinaria para mas torturas con los sueros y medicamentos endovenosos. Viajamos a casa en mi auto, y mi San Tango durmió casi todo el camino, o parecía que estaba dormido. Cuando llegamos a casa, lo bajé del auto, y lo ayudé a caminar un poco, por lo mareado que estaba, para que haga pis en su lugar favorito, y cuando había terminado, lo levante upa en mis brazos, y lo llevé cuesta arriba, primero por el parque, y después escaleras arriba, hacia mi casa del Santuario. Cuando con mucho esfuerzo pisé el ultimo escalón de las escaleras, de pronto aparece una des-compensación respiratoria en mi perro, mientras veía una diarrea muy sanguinolenta que caía al suelo desde el perro en la entrada de mi casa. Ahí mismo lo acosté a Tango, y me arrodillé junto a Tanguito, para ver que le ocurría con la dificultosa respiración, y muy rápido le vi la lengua que estaba totalmente pálida y anémica por la falta de sangre, y el oxígeno de la vida, y enseguida, en 2 segundos, me di cuenta de que mi amor se moría, que perdía a mi Tango, mi adorado Tanguito se moría, mi precioso Ángel de mi Alma se moría en mis brazos, para el gran dolor de mi Alma (al escribir esta oración irrumpo en un doloroso llanto de emoción). Al ver su paro respiratorio, le hice respiración artificial, boca a boca, pero sin éxito alguno, y en unos 15 segundos, mi perrito estaba muerto, ya no respiraba, su corazón ya no latía, se le había ido la Energía de la Vida, su Alma había partido hacia su nuevo destino, para dejarme aquí en la tierra con mi angustiada Alma con un destrozado Corazón. Rápido comencé con masajes cardiacos y respiratorios, oprimiendo su tórax con mis dos manos, y así lo hice durante la eternidad de unos 5 minutos; parecía que mi perro reaccionaba, parecía que respiraba, pero tan solo era una reacción refleja del cuerpo a mi esfuerzo físico de respiración artificial, y masaje cardíaco, pues mi perrito ya estaba muerto, el ‘señor’ se lo había llevado para el terrible martirio de mi Alma. Dios me lo había arrebatado, desde mis propios brazos, en la entrada de mi casa, junto a un charco de sangre, en la entrada de mi propio hogar, en una terrible escena que jamás podré olvidar. Dios permitió o inició la muerte de mi perrito en mis propios brazos, cuando yo ejercí una acción que quizás no debería haber realizado, el llevar en mis brazos a un paciente tan herido. Así, yo soy el gran culpable de la muerte de mi Tanguito, porque murió quizás por causa del apretón de mis brazos cuando yo en brazos lo llevaba; yo soy el culpable por haberlo llevado a irresponsables veterinarios; yo soy culpable por ser un ignorante al no tomar las decisiones perfectas; soy culpable por no haber sido un iluminado, culpable por no ser un gran santo para curarlo con mis manos; así, debo pagar con la culpa por la muerte de mi adorado perro por las ofensas de mi ignorancia; soy culpable de la muerte de mi amor Tango porque mi adorado Tango debió morir para que yo abriera aun mas los ojos, para que yo reaccionara aun mas en mi vida con este dolor, para que yo pudiera evolucionar mas en el dolor, para escribir sobre esta tragedia, para escribir sobre las injusticias, y para descubrir y describir lo que le pasó al Santo Job como fue descrito hace 2000 años en la Biblia (OC).
Una hora después de la muerte de Tango, lo llevé en mi Jeepito hacia lo alto de mi montaña, al lugar mas sagrado de mi santuario, para darle sepultura al lado de mi Capilla de los Ángeles. Pronto hice un gran pozo con una pala, en un lugar privilegiado, muy cerca del sepulcro de mi Santa Mushita, mi adorada gatita, que 1 año antes había sido víctima de un incompetente veterinario que le había causado la muerte unas pocas horas después de una simple castración para impedir que tuviera mas gatos en el santuario (hoy tengo 6). Antes de colocar a mi amor Tango en su tumba, con mucho esmero y cariño, limpie todo su tren posterior, que estaba manchado con la sangre que había perdido en su ultima crisis de diarrea, y con varias toallas, un balde de agua, y un perfumado jabón, limpié el cuerpo de Tango, hasta que estaba todo limpio impecable, para lucir su hermoso color dorado del pelaje hermoso de mi adorado perro Santo. Tango aun tenia sus hermosos ojos abiertos, que siempre miraban los míos, y su cuerpecito seguía caliente, aliviando el frío de mis manos, que cavaban la tumba en el frío invierno, cada vez que lo abrazaba, y lo besaba siempre en su hocico, en su preciosa nariz, para decirle, muy despacito, todo lo mucho que lo amaba, para darle mi ultimo amor de adiós, bajo el doloroso llanto de mi Alma. Mi adorado Taurus, su querido hermanito, estuvo siempre junto a nosotros, y el pobre Tauritus no entendía nada del porque su hermanito Tango ya no se movía, el porque San Tango ya no jugaba y correteaba con su hermanito, alrededor de la Capilla, como lo hacían siempre, cuando veníamos todos los días a la capilla a mirar las hermosas puestas del sol al finalizar el trabajo en el Santuario. Todo el fin de semana a Taurus le falto su querido hermanito, y el viernes y el sábado a la mañana Taurus subió a la capilla y lo buscó en su tumba. El domingo, San Taurus tuvo una crisis emocional como nunca había visto, y durante una hora no podía dejar de lamerme mi cabeza, en forma desesperada, parecía que el perro sintiera también mi mas profunda angustia de la depresión, mi mas desconsolada tristeza que se había hecho muy pesada ese triste domingo del doloroso fin de semana.
Y en ese triste atardecer del 31 de Julio, durante 2 horas, con la puesta del sol, bajo mi doloroso llanto, rendí mis plegarias ante mi adorado Tanguito, recite el Ave María muchas veces, para que la Virgen María estuviera con nosotros a la hora de nuestra muerte, abrazando en el suelo a mi adorado San Tanguito, bajo mis lagrimas de angustia y terrible dolor de mi Alma. La noche llegó, y coloqué el cuerpo de mi Tanguito en su tumba, para darle su descanso final. Me vi abrumado por el dolor, y no podía separarme de mi Ángel, que yacía frente a mi, hermoso como jamás lo había visto antes en mi vida. Durante los últimos meses de su vida, San Tango había tenido una pequeña irritación en la nariz, que le había causado una despigmentación de melanina en su negra nariz, para darle el color de una mucosa; y hete aquí otro Milagro de Tango, que por un Milagro de Dios, la pigmentación negra de su nariz había vuelto a su total normalidad, el color pálido de una mancha en su nariz, se había vuelto otra vez negra, y así, San Tango estaba hermoso como nunca antes había estado, para que yo pudiera recordarlo en todo su hermoso esplendor, y no demarcado por la muerte, ni por una enfermedad, sino que estaba espléndido, con su adorado color dorado, y conservaba su cuerpo aun caliente con la Energía del Alma, como si estuviera lleno de vida, mirándome con sus dulces y hermosos ojos, que aun me daban su total incondicional Amor. para tratar de consolar el terrible dolor de mi Alma.
Tenia ahora la difícil o mas bien la mas terrible tarea de echar la tierra negra sobre el cuerpo muerto de mi Tango; sin embargo no podía despedirme de mi Tango, era imposible para mi decir adiós en ese momento, mi Tango estaba aun caliente, y quería creer que por un gran Milagro mi Tango volviera a la vida, para arreglar mi vida, y aliviar el gran dolor de mi Corazón. Así pronto decidí echar la tierra sobre mi Tango mas tarde en la noche, sin la presencia de Taurus, cuando el cuerpo fallecido de Tango se haya enfriado en la fría noche. Y así pues, volví unas horas mas tarde, con la gigante linterna, y allí estaba mi San Tango, tan hermoso como siempre, y aun caliente, y ante mi dolor, no pude echar la tierra sobre el cuerpo de mi Tango. Bajo copiosas terribles lagrimas de dolor, después de besar varias veces a mi Tango, cubrí su cuerpo con la toalla mas hermosa que tengo, y ahí deje a mi Ángel, toda la noche, para enterrarlo en la madrugada del día siguiente. Y al editar este texto, 8 años mas tarde, irrumpo en un llanto de dolor de emoción.
La noche sin mi San Tango fue completamente terrible, de muchísimo llanto, y antes del primer canto de mi gallo, antes de las 6 de la mañana, ya me encontraba levantado, para ir a la tumba de mi Tango en la capilla, para darle la sepultura final, y darle el despido final a mi San Tango, con todo el Amor de mi Alma. Cuando me preparaba para subir a la capilla, aun en mi habitación, ocurrió un segundo Milagro de San Tango, con la Intercesión de San Taurus, que abrumo el Espíritu de mi Alma. De pronto veo que Taurus comienza a tener arcadas de vómitos, muy severas arcadas, y pronto comienza a vomitar, de la misma manera que lo había hecho Tango durante el inicio del desarrollo de su enfermedad. Mi angustia era locamente terrible, cuando pensaba que mi otro hijo, mi Niño mío de mi Alma, corriera el mismo destino de martirio, de que Dios o el Diablo volvían una vez mas, para atormentar a mi Alma, para hacer sufrir a mi otro Ángel del Amor, mi otro Ángel de mi Alma. Sin entender nada de lo que pasaba, comencé a reclamarle a Dios en voz alta: No por Dios! no lo puedo creer, NO por favor Dios, por favor no, Dios no puedes hacerme esto, no puedo aguantar esto, no me puede pasar esto, mientras veía el terrible espectáculo de las arcadas con el vomito de San Taurus. Al cabo de un par de minutos, la crisis de arcadas había finalizado, con un vomito, y vi en el piso ante mis pies, una Manifestación de Dios, un Símbolo de Dios, porque el vomito tenia un Color Dorado, como el color dorado de mis dorados perros Golden (Dorado), y además el vómito tenia la forma mas perfecta de un Corazón de Amor, el Símbolo del Amor, el Símbolo de la Presencia de una Manifestación de Dios del Amor de mi Alma. Ciertamente, infinidad de veces había tenido la Gracia de Dios de recibir este Símbolo de Dios, el Símbolo del Amor en el Corazón de Amor, como lo describo a lo largo de mi libro sobre Manifestaciones de Dios (sección X). Ahora lo veía ante mi, puesto de manifiesto por Taurus, a través de la Intercesión de un Ángel del Señor, mismo quizás el Ángel del Alma de mi San Tango que se manifestaba aún en la Tierra desde el Mundo Espiritual. Pronto me di cuenta de que se trataba de una Manifestación Divina, pero aun así, estaba atemorizado, mas bien aterrado, de que Taurus pudiera sucumbir a la misma enfermedad. Pronto limpie el vomito con un trapo, y me preparé para subir al cerro de la capilla, para despedirme del cuerpo de mi San Tango. Al escribir este texto, dos semanas mas tarde, Taurus jamás volvió a vomitar durante los siguientes días, y así el vomito de un Corazón de Amor es para mi una Manifestación de Dios, pues aunque parezca aberrante, el Símbolo del Amor se manifestó con el principal síntoma de la enfermedad de mi San Tango, un Corazón de Amor que se materializó a través de un vómito del hermano Taurus. El Símbolo del Amor que se manifestó en el dorado vomito era una Señal del Espíritu, que me indicaba que el Espíritu Santo y los Ángeles del Señor estaban conmigo, durante esta hora tan terrible, en una Experiencia Mística parecida a lo que me había pasado con el Milagro de la Lluvia durante la terrible muerte de mi Madre (sección X). Adjunto una Foto Milagrosa de mi San Tango, durmiendo con un gatito caminando sobre su lomo, con una Luz Dorada Manifiesta sobre el Pelo Dorado del Cobrador Dorado del Ángel de Dios (S099).
Después de experimentar este extraño evento de la Materialización del Corazón, subí solo a mi capilla, sin Taurus, que dejé encerrado en el cuarto, y así subí solo a la capilla para dar sepultura final y despedirme del cuerpo de San Tango. Con la primera luz del amanecer me encontré en el Cerro de la Capilla, arrodillado frente al cuerpo de mi adorado San Tango. Otra vez, mi querido Tango estaba mas hermoso que nunca, con su dorado color, y una mirada dulce llena de amor con los ojos aun abiertos que me miraban hacia la profundidad de mi Alma. La cabeza se había enfriado por la fría noche, pero el abdomen todavía estaba tibio, y así, mi adorado Tango aun me calentaba mis manos, con la energía de su eterno Amor, mientras tocaba su cuerpo en el crudo invierno para darle sepultura final. Pronto me puse a llorar, con un llanto de gran angustia, pues esta era mi despedida de mi Tanguito, mi adorado perrito que nunca mas podría ver, y que nunca mas podría tocar para el gran deleite de mi Alma. Lloré desconsoladamente, como durante la muerte de mi madre, mientras besaba una y otra vez el hocico de mi adorada criatura. Tango mío, mi Tango querido, cuanto te amo, Amor mío! Lloraba y lloraba, y no podía cubrir con tierra el cuerpo de mi adorado Tanguito. Durante media hora sufrí como pocas veces he sufrido en mi vida, hasta que al fin pude tener el coraje de verter tierra de la tumba sobre el cuerpo de mi San Tango. (PS: y cuando edito este texto, en el año 2016, me quiebro en un angustioso llanto de dolor, llamando a mi Tanguito, mi querido amor, porque te fuistes amor, deberías haberte quedado conmigo con Tauritus, muchos años mas, para darnos el amor que siempre me distes los años que tuve el placer de tenerte a mi lado). Su hermosa dorada cabeza quedó al descubierto hasta el ultimo momento, y tras muchos besos en el hocico de mi Ángel, cuanto terrible dolor me fue colocar con mis manos la tierra para cubrir la cabeza de mi San Tango con la tierra santa de mi santuario. Y al fin, lo había hecho, la tierra cubría ahora a todo el cuerpo de mi San Tango, y nunca mas volvería a ver a este mi Ángel de mi Alma. Minutos después baje del cerro llorando desconsolado, y pronto estaba con mi San Taurus, para atenderlo, mimarlo, y cuidarlo hasta su muerte, o la muerte mía, y cuidar también a los muchos otros animalitos de mi Santuario que ya reclamaban mi presencia, para darles mi amor, aun cuando mi corazón estaba totalmente partido por la partida de mi Adorado Tango.
Ese fin de semana me dediqué a rescatar todas las fotos de Tango, y de su hermano Taurus, fotos que había tomado durante los últimos 6 meses para mostrar la belleza de mi Santuario (fotos). Por suerte había tomado mas de 2,000 fotos, y mis 2 perros están presentes en cientos de fotos, ya que su hermosa presencia siempre mejoraban las fotos del hermoso Santuario (foto). Pensé que seria doloroso ver las fotos de mi Tanguito, pues me harían recordar las felices experiencias, que ya no tendría, muchas hermosas alegres experiencias que siempre había tenido al subir a las montañas con mis adorados perros, para jugar y bañarnos juntos en las lagunas del Santuario (foto). Sin embargo, la sesión de extraer y ver las fotos de mis perros fue también una experiencia agradable, pues al ver a San Tango sentía su presencia, me daba cuenta de que con las fotos jamás lo perdería por completo, pues podía ver su presencia física, y su Espíritu aun estaba con mi Espíritu, y su hermosa imagen la tendría conmigo hasta el fin de mis días.
Ha pasado 1 mes desde su muerte cuando escribo otra vez este texto, y aun sufro de una profunda depresión por la falta de mi Tango. Mi adorado Taurus me consuela el Alma, y no sabría que es lo que haría con mi vida, el sufrimiento que yo padecería, si no fuera por la alegre presencia de mi Tauritus vida mía, que me ama y me consuela esta triste vida mía. Mi vida jamás será igual, pues siempre extrañaré a mi Tanguito mi Amor vida mía.
Estoy seguro que el Alma de San Tango pasó a un mundo mejor, para seguir con su evolución en el Gran Cosmos de la Eterna Vida. Así, la única Alma que sufre por esta perdida es el Alma mía, que sufre, y sufrirá, hasta mi muerte, porque jamás podré recuperar la compañía y alegría que me proporcionaba mi fiel eterno amigo, mi Adorable San Tango, mi Amor Vida mía. Gracias a Dios, o quizás deba decir por suerte, lo tengo a mi Adorado San Taurus, que me soporta emocionalmente, me alivia, y me da fuerza para seguir adelante, para seguir viviendo, para cuidarlo hasta su muerte, o la muerte mía.
Las ultimas horas y agonía que sufrí con la muerte de Tanguito, mi adorado San Tango, mi mas preciado Tango, fue de lo peor que me pasó en mi vida, como cuando sufrí la muerte de mi amada madre mía (sección X). La muerte de Tango me llevaron a una crisis emocional de una profunda depresión, llena de llanto, que duró meses, por la perdida de lo que fue con Taurus mi mejor amigo, un hijo, un niño mío, eran los niños que yo no tuve en mi vida, era un amor compañero de la vida, un gran Amor de mi Alma. Hoy, cuando edito este texto casi 10 años mas tarde, lloro con profunda tristeza, porque extraño el Precioso Amor y la Total Alegría que este Ángel Ser Vivo me daba en mi vida. Soy un Bendecido de Dios de haber tenido la Gracia Divina de compartir parte de mi vida con mis adorados Taurus y Tango, mis amorosas hermosuras, mis amorsuras, almas amadas mías.
La partida de Taurus
El 10 de Marzo de 2016 falleció mi adorado amor Taurus.
Hoy es 11 de marzo, son las 3 am de la mañana, estoy con insomnio, sufro angustia por mi desconsuelo por la pérdida de un hijo, un pequeño amoroso niño de 5 a 7 años que falleció un mes después de cumplir 14 años.
El 9 de Marzo festejé el cumpleaños de mi madre; recordé esta fecha con mucho cariño. Salimos temprano con Taurus a la playa: era lo que a Taurus mas le gustaba: ir a la playa para buscar su pelota que le tiraba al mar, que buscaba con tanta alegría; le tiraba la pelota amarilla y la traía hacia la costa, la dejaba sobre la arena, y se revolcaba sobre la arena, muchas veces, en un espectáculo de puro amor y felicidad de contacto con la naturaleza, y rápido se volvía a parar, junto a su pelota, y me miraba, y yo agarraba otra vez la pelota, y juntos volvíamos a la orilla, y Taurus me miraba atento, y le volvía a tirar la pelota lo mas lejos que yo podía, y Taurus se lanzaba otra vez al agua para buscar su pelota nadando y superando las olas del mar. Esa mañana, a pocas horas de su muerte, Taurus había buscado su pelota en el agua, como siempre lo había hecho, le tiré la pelota unas 10 veces esa mañana, hasta que consideré que el ejercicio del día era suficiente. Taurus había salido solo del agua 10 veces, después de nadar unos 50 metros en el mar, y salió solo, sin ayuda, superando las pequeñas olas del mar, salió despacio, pero firme, con mucha fuerza, que aún tenía, y me dejó su pelota en la arena, y al fin se la saqué para que no se revolcara mas sobre la arena; y como siempre, fuimos a caminar por la playa, para secarlo, y a pasear en la hermosa playa junto al mar. A la hora volvimos al auto, y lo sequé muy bien, primero con una toalla, y después con una segunda toalla bien limpia, lo sequé muy bien y con mucho cariño, como si fuera la última vez que secaba y cuidaba con mucho amor a mi adorado perro, cuando salió mojado del agua de la playa, y esa fue la última vez que Taurus se baño en el mar.
Enseguida fuimos al supermercado a comprar comida, donde muy rápido siempre hacía las compras para Taurus y los gatos; Taurus me esperaba en el auto tan solo unos minutos que lo dejaba solo en la sombra en mi seguro lugar de siempre, debajo de los grandes pinos. Esa mañana también pasé rápido por dos concesionarias de auto para ver los precios de camionetas furgón que quizás iba a comprar para hacer un viaje con Taurus por el sur de Chile y Argentina, un viaje que había planeado hacer con Taurus desde hace 2 años atrás: si vendía el santuario nos íbamos con Taurus a viajar para visitar la naturaleza, necesitábamos un buen lugar en el auto para dormir, y por eso, durante 2 años siempre busqué cual sería el mejor auto para viajar con Taurus, para visitar con mi amor los parques nacionales de los Andes; hoy estoy triste, este plan ya no existe más: el viaje lo tendré que hacer solo, sin la compañía y alegría de mi adorado Taurus.
Llegamos a casa pronto; Taurus estaba muy bien, y me pidió 2 huevos que Taurus quería cuando le mostré los huevos que habían dejado las gallinas en mi cama; le mezclé los 2 huevos con su ración y comió con mucho apetito, y después le di sus galletitas favoritas; y pronto Taurus se echó para descansar sobre su alfombra preferida. Hacia algo de calor, aunque estaba nublado, y como no llovía, y había sequía, y los árboles sufrían por la sed, yo salí solo a regar; y me pasé regando con manguera casi 3 horas sin parar, y a eso de las 18:30 horas volví a las casas; Taurus estaba aún acostado sobre la alfombra; bajé unos minutos a la laguna de la entrada para darle ración a los carpinchos: me estaban esperando la familia entera de siempre: la gran madre mansa, con los 10 pequeños carpinchos, la segunda madre salvaje, el macho grande manso, los 3 medianitos mansos, y un medianito salvaje. Todos estaban allí, y les dejé el maíz quebrado, y decidí volver rápido a las casas con Taurus. Pronto estaba en la terraza y traje la cena de la heladera para comer con Taurus, pues siempre comíamos juntos, desde hacía muchos años: yo compartía mi cena con la mano con Taurus que se sentaba a mi lado para comer conmigo; cuando me senté junto a Taurus para comer, enseguida me di cuenta que algo no estaba bien, pues no reaccionó, se quedó postrado, no le interesaba la comida, le acerqué a la boca un pedazo de mi tarta pero Taurus ni siquiera la olfateó; ahí me di cuenta que estábamos mal, y pensé que quizás este sería el principio del fin de mi adorado Taurus, y así fue; ‘hasta aquí llegué’ me decía mi amor Taurus, ese fue el principio del corto fin de la muerte de mi adorado amor Taurus. Comí la tarta solo, junto a Taurus, triste y muy preocupado, intuyendo que quizás se venía el fin en esta vida de mi adorado Taurus.
Se hizo de noche y le pedí a Tauurus que entrara en la casa, pues estábamos en el deck afuera, como siempre lo hacíamos para la cena en la noche. Entramos adentro y nos acostamos: Taurus en su alfombra junto a mi cama, y yo en la cama, y yo podía tocar y acariciar a mi adorado Taurus, que estaba muy bien, no sufría, tenía su respiración normal, pues no hacía tampoco calor, y no estaba para nada agitado. A las 23:30 de la noche me despierto con un terrible calambre muscular en mi pierna, hacía mas de 2 años que no tenía un calambre muscular, y esa noche, en ese momento, aún el 9 de marzo en el día de mi querida madre, tuve este doloroso calambre muscular que me despertó, y rápido hice unos masajes en el muslo para aliviar el calambre, y en 2 minutos se alivió, y entonces vi que Taurus se había acostado en la entrada de la casa, en la puerta de la casa que estaba abierta, parece que Taurus quería estar mas en contacto con el fresco que había esa noche. Recuperado del calambre encontré a Taurus que estaba algo agitado en su respiración, y se escuchaba algo de estertor en su pulmón, que seguro era consecuencia del linfoma que lo afectaba en todo su cuerpo; también me pareció que tenía algo de frío; así, enseguida me acosté junto a Taurus y lo abrasé y lo calenté con mi cuerpo, y me quedé abrazando a Taurus hasta que se alivió de su agitación: en algunos minutos ya no se quejaba, no tenía frío, y paró el estertor; volqué el cuerpo de Taurus sobre la alfombra, y sobre la alfombra lo corrí hacia adentro de la casa al lado de mi cama, para alejarlo del frío; y sintiendo una vez mas que quizás se acercaba el fin, volví a abrazar a Taurus, y me quedé recostado junto a Taurus en el piso sobre la alfombra, durante mas de 1 hora; Taurus estaba bien, sin agitación, corrí la alfombra con Taurus aún mas cerca de mi cama, junto a mi, y me acosté en la cama, junto a Taurus, y mientras tocaba el cuerpo y acariciaba a Taurus junto a mi, me quedé pensando y meditando, unas 2 horas, quizás el fin de Taurus se acercaba, yo ya sabía que quedaba poco tiempo, y a eso de las 4 am me volví a dormir, hasta las 6:30, y ya estaba despierto con el canto del gallo temprano de la mañana. Al despertarme Taurus seguía en su lugar, yo lo acariciaba, mi Taurus levantaba un poco la cabeza para mirarme, y pronto volvió a echar la cabeza sobre la alfombra; nunca mas Taurus se volvió a levantar de ese lugar. A las 7 am me hice un café, ya había decidido llevar a Taurus al veterinario para darle la inyección final, para que al fin Taurus pudiera volver con los Ángeles, con su adorado hermano Tango, y con mi madre y con mi padre, en algún lugar aún mas Celestial. Cuando tomaba el café, sentado a 4 metros de Taurus, mi adorado perro levantó su cabeza para mirarme, como siempre lo hacía, para saber donde yo estaba, pues mi adorado compañero amor necesitaba siempre saber donde yo estaba. Levantó la cabeza y me vio sentado, y volvió a bajar la cabeza para descansar; Taurus seguía dormitando, el sueño final estaba cerca.
Después del café salí afuera a ver como estaban las ovejas: todo estaba tranquilo; la majada grande estaba recostada en su lugar de siempre debajo de las grandes acacias, y las viejitas estaban debajo de los cipreses en su lugar preferido de protección. Pronto abrí el gallinero, saqué a las gallinas, les di de comer, y limpié rápido el gallinero con agua como siempre lo hacía bien temprano todas las mañanas. Después limpié todo el corredor de las casas y el garaje donde estaba el auto, pues Taurus tendría que caminar hasta el auto, y la caminata sería por un lugar limpio y seco, y una vez que estaba todo limpio, y yo estaba listo para salir con Taurus para lo del veterinario, preparé todo en el auto, la frazada bien limpia en el asiento trasero, todo estaba listo para salir, y lo busco a Taurus, y lo llamo para que viniera, pero Taurus no se levantó, ya no podía levantarse, estaba débil, era el lento final de Taurus, un final que yo iba a adelantar con el veterinario, para que mi adorado Taurus no sufriera nada, absolutamente nada, pues lo íbamos a poner a dormir con un anestésico con el veterinario. Taurus no se levantó, y yo no insistí, y pronto lo levanté en mis brazos, y lo llevé en mis brazos hasta su cama en el auto, unos 40 metros, y lo recosté a Taurus en el asiento trasero del auto con alguna dificultad por lo pesado que era (40 kg); y rápido lo dejé bien cómodo, en donde siempre lo dejaba cuando íbamos a la playa a caminar y a jugar con la pelota en el mar.
El viaje fue algo nervioso para mi, manejaba con una mano, mientras sostenía la mano de Taurus con la otra, soltando la mano de Taurus solo en alguna maniobra mas peligrosa; en el viaje llamé al veterinario, avisando que iba para allá, así estaría listo para dar el anestésico final. La veterinaria abría a las 9:00, y llegamos a las 9:02, y el veterinario nos estaba esperando; entré a Taurus en una camilla con ayuda del asistente; Taurus estaba muy postrado, mi Taurus se estaba muriendo. El veterinario preparó el inyectable y de inmediato encontró la vena, y mientras inyectaba el anestésico, yo abrazaba a Taurus, y tenía mi cabeza junto a la de Taurus y le besaba el rostro, y le hablaba y le decía cuanto lo amaba. Taurus ya estaba medio dormido, y Taurus ya sabía que se estaba yendo, se estaba yendo de la Tierra, y me despedí con un amoroso abrazo y un fuerte beso, y rápido, bajo mi terrible llanto, Taurus dejó de respirar, y dejó de latir su corazón, y así se me fue mi amado del mundo, y yo estaba desconsolado, desolado, como pocas veces había estado en mi vida; y llorando le dije al veterinario que mi madre y Taurus eran lo mejor que me había pasado en mi vida.
Pronto llevamos a Taurus al auto en la camilla y lentamente volví casa. La pérdida de Taurus era terrible, pero fue todo muy rápido, totalmente indoloro, y pensé que todo había salido muy bien, quizás hasta mejor imposible, todo era perfecto, excepto mi dolor; ahí comenzaba recién mi gran dolor, mi gran angustia; me fue mucho peor de lo que yo me había imaginado; no podía creer que Taurus ya no estaba conmigo; sin embargo, sentía que tener a su cuerpo junto a mi era aún una consolación. Me fui a casa, lentamente, con Taurus atrás, yo acariciando su patita cada tanto; y lentamente comenzó a llover, cada vez un poco más, y ese día de la muerte de Taurus llovió todo el día, sin parar, y llovió 60 mm, suficiente para terminar con la terrible sequía para dar agua hasta a los árboles mas grandes; parecía que tenía que morir el Santo Taurus para hacer caer la bendita agua que tanto necesitaban los árboles.
Llegamos a casa y nos esperaban los 5 gatos, estaban todos en casa, cosa muy rara, parecía que los gatos sabían de mi dolor emocional que sufría, se quedaban conmigo, y se quedaron conmigo todo el día. Dejé a Taurus en el auto muy cómodo, para ver si paraba la lluvia para enterrarlo arriba en la Capilla. Llevé la pala y el pico, y marqué el lugar para la excavación, esperando a que parara la lluvia; pero no paró de llover, y llovió todo el día, a veces mas fuerte, otras veces mas suave, y todo el día estaba en la casa, y en el garaje con Taurus, ordenando cosas en casa, y yendo a visitar a Taurus cada tanto para darle un gran beso de amor; no podía creer lo que estaba pasando, Taurus ya no estaba más; cuando iba a hacer algo en el santuario, pensaba donde estaba Taurus, para ir a buscarlo, y traerlo conmigo, y todo el día me pasó esto, y al día siguiente también pasó, y al tercero también, me pasó durante 3 semanas, me faltaba Taurus, y yo lo buscaba, y hasta lo llamaba, y pronto me daba cuenta que ya no estaba…
Todo el día llovió, y llegó la noche y no pude enterrar a Taurus en la capilla; lo haría bien temprano la mañana siguiente; ese día fue un velorio, lo visité 20 veces en el auto, lo amaba y le daba un beso, y desconsolado me iba a hacer alguna cosa; revisé todas las viejas fotos, y junté todas las fotos de Taurus y Tango de la computadora, para hacerlas imprimir y colocar en un álbum muy especial de Taurus y Tango. Vino la noche y me acosté, y me desperté a las 2:30 am de la mañana, y no pude dormir mas, medité todo el tiempo con Taurus, y esperé a que cantara el gallo a las 5:30; y a las 6 am, aún de noche, me hice el café, y ni bien hubo luz, agarré el jeep, lo traje al garaje, y subí a Taurus en su último viaje en el Jeepito; a Taurus le encantaba andar en el Jeepito, yo lo subía siembre upa los últimos años, para que no tuviera esfuerzo en la cadera, y Taurus movía la cola de alegría para dar una vuelta, quería venir siempre conmigo, quería estar siempre conmigo, y con la avanzada edad, quería aún mas estar siempre al lado mío; cuando tenía que salir a regar en el verano, para que Taurus no estuviera en el sol, lo tenía que dejar encerrado en las casas, pero Taurus estaba solo como máximo 2 horas, y enseguida lo venia a buscar; por eso hoy cuando salgo a hacer algo solo, porque Taurus ya no esta mas, y termino lo que estoy haciendo, pienso: vamos a buscar a Taurus, y a los 3 segundos me doy cuenta que Taurus no esta mas: esto es el gran dolor que hoy sufro, estoy solo, estoy mas solo que nunca, y parece que estaré solo, mas solo que nunca, con este gran dolor en mi Alma.
Hoy es viernes 11 de marzo y a las 6:30 de la mañana transbordé a Taurus desde el VW al Jeepito para subirlo a la montaña y enterrarlo al lado de Tango junto a la Capilla de los Ángeles. Mientras Taurus yacía cómodo en el jeep al lado de la capilla, yo hice el pozo bien amplio con pala y pico, encontré un buen lugar sin piedra, y me cansaba mucho el trabajo, dejaba un minuto para descansar e iba al jeep a darle un beso a Taurus. Esto fue una larga despedida final, y lloré profusamente, como lo había hecho con Tango 8 años antes. Cuando el pozo era amplio y lo había finalizado, lo cargué a Taurus con mucho cuidado en mi brazos, una última vez, y lo coloqué con mucho cuidado en el pozo de la capilla mientras lloraba profusamente. Pronto estaba de rodillas frente a a tumba con Taurus, y cuando junté fuerzas, comencé con mis manos a colocar la tierra encima del cuerpo de mi Taurus, primero sobre las 4 patas, y después sobre todo el cuerpo, y por último, le di un gran beso en la frente a mi Taurus para una despedida final, y pronto tapé la cabeza de mi adorado Taurus; esto fue de lo mas doloroso que yo tuve que hacer en mi vida. Llorando profusamente dejé todo bien prolijo, y el entierro había finalizado. Con mucho llanto yacía de rodillas frente a Taurus, y después seguí llorando y caminando alrededor de la tumba de Taurus, meditando y rezando, agradeciendo a Dios por haber podido tener a mi adorado Taurus, durante tanto tiempo, agradecí por haber sido bendecido con esta increíble noble criatura que era tan solo amor y bondad, era mi felicidad y mi alegría durante tantos años.
A la hora dejé la tumba con Taurus, y bajé a las casas, para seguir ordenando todo lo que había para ordenar. Revisé otra vez los álbumes de fotos del santuario para sacar algunas fotos mas de Taurus y Tango para hacer un precioso álbum con mis adorados perros de mi Alma. Y también me puse a escribir todo esto en la computadora, para tener por escrito todo esto lo que me pasó en estos dos días que fueron de los mas tristes de mi vida, y cada detalle recordaré para siempre; y abajo termino con el texto que le mandé a una persona que había conocido en la playa gracias a Taurus, y que adoraba a Taurus:
‘Ayer a las 9:15 de la mañana falleció mi adorado Taurus. Empezó a sentirse mal la noche anterior, no comió, pasé mal la noche sin dormir, a la mañana no se levantó, lo llevé al veterinario para mandarlo a su casa celestial, con su hermano, mis padres, y todos los angelitos de Dios. No sufrió nada, solo tuvo una agitación respiratoria, se durmió en mis brazos, tenía mas de 14 años, ya estaba para irse de este lugar. Tengo el consuelo que vivió una larga vida con mucha salud, nunca le faltó nada, y yo lo cuidé como a mi propio hijo de 5 años durante sus largos 14 años de vida. Horas antes de morir aún se tiró al mar a buscar a su pelota, 10 veces la sacó solo, como un gran luchador, hasta el final, para regalarme el regalo mas preciado de mi vida: nunca lo voy a olvidar. Yo soy el que ahora sufre mucho la pérdida del gran amor de mi vida: mi Ángel de Amor, mi Ángel de la Alegría, mi Ángel de la Felicidad. Mi vida cambió para siempre. Taurus y su hermano Tango, y mis padres, fueron lo mas importante en mi vida. Taurus descansa ahora al lado de la Capilla de Ángeles, junto a su hermano Tango, mi gata Mushita y mi gato Bilito, y con las cenizas de mis queridos padres, el lugar reservado para las Almas que mas he amado en mi vida. Muero de tristeza por esta gran pérdida, Taurus era el mas grande consuelo que yo tenía en esta mi lucha contra toda la maldad que existe por causa del hombre. Voy a recordar a Taurus con el Amor mas grande que yo puedo tener y dar a un Ser Vivo.’
Que triste es hoy mi vida: perdí a mis padres, perdí a mi hermano Jan hace 4 meses atrás, de mi otro hermano estoy un poco alejado, toda la distante amilia me había robado, muchos amigos me abandonaron, estoy por perder el santuario, a todos mis animales, y gran parte de mi pequeña fortuna, perdí a mi adorado Tango años atrás, perdí a Mushita, y a Bilito, y a otros queridos animales del santuario, no tenía un peso, iba a perder mi santuario y todos mis otros animales, y ahora pierdo a Taurus: creo que estoy ahora en el peor pozo de depresión de mi vida. Espero que pronto se resuelva mi situación en el santuario, que me protejan los Ángeles, que me protejan mis padres, los santos y las santas, y que me proteja Taurus que estará conmigo hasta el fin de los tiempos. Le pido a Dios y a mi Ángel, a Jesús y la Virgen, y a mis santos y santas, y a Taurus y Tango, y a mis padres, que estén conmigo e intercedan para resolver mi problema de venta con el santuario: mi vida debe cambiar: no quiero mas tener que lidiar con toda esta gentuza de mis vecinos y empleados; quiero dejar a toda la gentuza que me rodea para dedicarme a consolar a los Santos Animales; es lo último que yo quiero hacer en este mundo; que todos los animales no sufran mas a causa del perverso malvado humano.
Dos días después de la muerte de Taurus me hicieron una oferta para comprar mi campo, y algunos días mas tarde se firmó el boleto de reserva de la venta del campo. Taurus se descompuso en la noche del miércoles 9 de Marzo del 2016; el jueves 10 de Marzo mi Taurus falleció a la mañana en mi brazos; el viernes 11 de Marzo a las 6 de la mañana lo subí a la capilla y lo enterré al lado de su hermano Tango; y ese viernes abrí la computadora para ver mis emails, y había un mail muy importante con un cliente que iba a venir a ver el campo y estaba interesado en comprar el santuario. Al día siguiente vendí el campo. Taurus me había vendido el campo, al fin había resuelto mi grave problema financiero. Me ofrecieron quedarme a vivir y cuidar del santuario, pero enseguida me di cuenta que sin Taurus no podría quedarme en el santuario, y decliné la oferta de quedarme a trabajar y vivir en el santuario. Taurus me marcó el nuevo rumbo de mi vida. Partió Taurus y yo me voy del santuario. Taurus es la vida y la alegría y el gran amor que yo recibía en el santuario. Tengo el gran desconsuelo en saber que jamás recibiré otra vez tanto amor de un ser vivo, como el amor que me dio mi compañero de vida durante estos últimos 14 años. Taurus y Tango han sido la bendición mas grande que yo he recibido en mi vida. Pronto escribiré mis memorias sobre el amor que yo tengo y que tuve con mis adorados Taurus y Tango.
Estoy seguro que el Alma de Taurus pasó a un mundo mejor, para seguir con su evolución en el Gran Cosmos de la Eterna Vida. Así, la única Alma que hoy sufre por esta perdida es el Alma mía, que sufre, y sufrirá, hasta la muerte mía, porque jamás podré recuperar la compañía y alegría que me proporcionaba mi fiel eterno amigo, mi Adorable San Taurus. Hoy es 13 de Marzo y aún lloro la ausencia de Taurus: lo busco y lo llamo, lo recuerdo siempre, me hace tanta falta su presencia de cariño y amor, nunca podré reemplazar tal amor que me tenía un ser vivo, un amor que tanto me amaba, que no comía y no tomaba agua cuando yo por un par de horas no estaba. Taurus es el último gran amor de mi vida; no creo que aparezca otro ser vivo que tanto me amará como Taurus; el perfecto amor de un ser vivo que amaba mi esencia, mi espíritu, mi amor que yo le daba. Hoy le agradecí a Dios por haberme dado a Taurus: soy un bendecido de Dios por haber tenido tantos años a Taurus. Ya me lo habían dicho una vez: ‘usted es un Bendecido de Dios por tener tal perro a su lado’.
También le agradecí a Dios por el santuario que me había dado; que me había dado para su cuidado, para cuidar de mis animales y de mis plantas, para cuidar de la fauna salvaje del entorno que era aniquilada por los brutos criminales cazadores y vecinos: por lo menos pude frenar la matanza de mis vecinos después de una larga lucha, después de mucho sufrimiento y peleas con policías, abogados y jueces que no entienden el verdadero valor de las plantas y los animales. Y defendí la vida de Taurus arriesgando con ir a prisión cuando un día amenacé con matar a un delincuente vecino cazador que acechaba con su arma de fuego la vida de Taurus; a este delincuente le prohibieron usar armas de fuego, y jamás pudo matar a otro inocente ciervo, gracias a Taurus (OC).
Siento que es hora de partir de este santuario. Parece que Dios ya no me quiere mas en este lugar; y sin Taurus no quiero, o puedo estar mas en este lugar; es un sufrimiento constante su ausencia; la pena mas grande de dejar el santuario es que dejaré el cuerpo de Taurus y Tango al lado de la capilla, y los restos de mi Mushita y Bilito, y las cenizas de mamá y papá; los tendré que dejar y olvidar; y aún no se que haré de mi vida, los últimos años de mi vida, si seguiré luchando por los animales, o si dejaré esta lucha que parece tan inútil pues el hombre es un total monstruo que maltrata y mata a los animales, y no hay justicia, y los animales no tienen derecho a una vida digna; ni el papa cristiano los protege, hasta el papa es cómplice de la tortura y la matanza, y los come, y permite su caza, y la tortura permite para la experimentación con animales (sección X). Parece que la única manera de terminar con el sufrimiento va a ser la Aparición del Arcángel para el exterminio de la especie humana (sección X).
Mi duelo con Taurus duró 1 mes, y otro mes; lo lloré 1 mes, y aún más, y lo busqué y lo llamé durante mas de 1 mes después de su muerte. Después del mes de profundo sufrimiento, me fui dando cuenta que Taurus había partido para siempre. El segundo mes sin Taurus fue muy duro también, y al escribir este texto, han pasado 3 meses desde su muerte, y sigo sufriendo en una terrible depresión. La vida es muy triste sin Taurus, todo cambió desde la muerte de Taurus, necesito irme del santuario, para iniciar una nueva vida, en otro lugar, pero siempre llevaré en mi Alma Corazón Amor el amoroso recuerdo de mis adorados Taurus y Tango.
Donación en memoria de Taurus y Tango
Para honrar la memoria de mis queridos perros decidí hacer una donación importante de dinero al principal refugio de perros de mi ciudad. Abajo cito parte del texto que mandé a las autoridades del gobierno y a varias protectoras de perros, presentando mis ideas de como encarar el grave problema de perros y gatos abandonados, para ayudar aliviar el sufrimiento de estos animales que sufren enjaulados por la ignorancia del hombre:
Habiendo vendido mi santuario por causa de falta de recursos financieros, tengo otra vez dinero para ayudar a los animales y voy a donar dinero a los refugios de animales para aliviar el sufrimiento de los animales. Ya en el pasado había hecho importantes donaciones en mi vida: la primer donación de 25,000 U$S la hice tras la muerte de mi madre; la segunda donación de 15,000 U$S la hice tras la muerte de mi padre; y la tercer donación de 20,000 U$S la hago en memoria de mis fallecidos perros Taurus y Tango. Además de la entrega en efectivo voy hacer un testamento dejando todo mi patrimonio para invertir para el exclusivo bienestar de todos los animales; y todo el dinero de los muchos juicios que cobraré por daños contra delincuentes vecinos y cazadores y muchos otros atorrantes que me han matado y dañado a mis animales, lo donaré todo, para los refugios de animales.
Las leyes del país deben cambiar para proteger a los indefensos animales abandonados y maltratados en la vía pública: los perros y gatos, y muchos otros, como los caballos; todos son también ciudadanos de la sociedad, son patria del país, y merecen la seguridad, la protección y todo el amor que estos animales con su adorable presencia siempre nos dan. Además, el gobierno debería cobrar un nuevo impuesto para los animales, dinero que será dispuesto solo para los animales, y debe aportar recursos financieros y sus vastas tierras que no utiliza para hacer apropiados refugios para animales. Varias veces yo había ofrecido al gobierno donar toda la tierra de mi santuario, mis 300 hectáreas, para hacer un refugio de animales (PS: ni pelota me dieron). En este escrito aprovecho para pedir a todos los hombres y mujeres de buen corazón, especialmente a los que tienen dinero, que ayuden con obra y plata para aliviar el sufrimiento de nuestros animales, y que se tome mi ejemplo de lucha contra los delincuentes, utilizando los recursos legales para que los delincuentes paguen por sus delitos con altas multas, ayudando con el dinero recaudado de los juicios a los que no pueden defenderse como los miles de perros y gatos, y otros animales, que son abandonados, mal-tratados, torturados y muertos por el ignorante perverso hombre.
La libertad es el derecho universal mas importante de todos los seres vivos; la libertad es mas importante que la vida misma; ciertamente, yo prefiero estar muerto que vivir en una jaula encerrado por el injusto perverso hombre. En mi visita a varios refugios de animales, me encontré que los perros estaban trastornados emocionalmente por estar encerrados y hacinados en jaulas; este terrible stress de estar enjaulados y hacinados en una jaula vuelve a ciertos perros agresivos, y a veces se pelean, y mismo me han contado que se pelean hasta la muerte. Esto no es culpa del perro; es culpa de los ignorantes hombres que no saben como cuidar a los pobres perros. La solución a este grave problema que tortura a los perros es simple: se tiene que organizar un refugio de animales donde los perros puedan estar en libertad que es la condición esencial para que una población viva en harmonía y pacíficamente; los perros deben estar sueltos, para convivir juntos en relativa felicidad hasta que se pueda encontrar para los perros abandonados un buen dueño con un buen hogar. El refugio de animales seguiría teniendo muchas casitas en toda su extensión, adonde los animales vuelven a dormir, vuelven para comer, y entran para refugiarse del calor del sol y los vientos y lluvias y el frío del invierno. Los perros que han sido adiestrados por el malvado hombre a ser agresivos, se pueden mantener aislados, para que no mutilen a otros perros, o mismo se los podría tener sueltos con un bozal y ver si con el tiempo se adaptan otra vez a la sociedad canina. Todos los seres vivos tienen derecho a una larga vida y a vivir feliz en plena libertad!
Esta propuesta de manejo de los perros en libertad debe ser implementada por los refugios del gobierno y por todas las protectoras de animales, y las protectoras deben trabajar junto a las autoridades del gobierno que tienen la obligación moral y legal de proteger a los animales abandonados con sus recursos financieros y sus tierras, para crear los refugios necesarios, hasta que se controle con castración el exceso de la natalidad canina. Todos los que amamos a los animales debemos trabajar juntos (la unión hace la fuerza), para asistir de la mejor manera a nuestros queridos animales. El trabajo no termina con establecer buenos refugios de animales; debemos tratar de cambiar las leyes de los ignorantes y desalmados políticos y gobernantes que no aman a los animales; debemos establecer un nuevo impuesto para los animales para tener recursos que solo se inviertan para el beneficio de los animales; debemos establecer leyes para condenar a los que mal-tratan a los animales, con enormes multas y mismo con prisión; y debemos prohibir la caza de todos los animales que hoy son exterminados por los brutos cobardes cazadores amparados por las inmorales leyes del perverso hombre.
El gran santo Mahatma Ghandi expresó sus sabias palabras: ‘La grandeza de una nación y su progreso moral se puede juzgar por la forma en que tratan a sus animales’. A estas inmortales palabras yo agrego que la grandeza de una nación y su progreso moral también se puede juzgar por la forma en que cuidan a sus perros abandonados.
Yo dedico esta donación que hago para todos los perros y gatos desamparados, a la memoria de mis adorados perros: Taurus y Tango. Estos adorables perros, junto a mi querida madre y padre, son los seres vivos que mas amor me han dado en mi vida, y los que mas amé en mi vida; mis perros han sido mi gran alegría, mi mayor felicidad, son mi amor y mi paz; son el constante consuelo de mis sufrimientos; mis perros son la bendición mas importante de mi vida!
Aquí concluyo este capítulo sobre mis adorados perros, con las palabras del senador George Best en su discurso final para defender en un juicio los derechos de un perro; un tributo al mejor amigo del hombre, un tributo al ser vivo mas noble que existe en nuestra Madre Tierra; este discurso es uno de los mas hermosos de la historia de la humanidad: un breve discurso que fue inspirado por un perro; el PERRO, que sin duda es, fue siempre, y siempre será, el mejor amigo del hombre!
Tributo al Perro
Señores del jurado: el mejor amigo que un hombre tiene en el mundo puede volverse contra él y convertirse en su enemigo; el hijo o la hija que ha criado con tanto esmero y amor pueden resultar desagradecidos; aquellos que se encuentran más cerca de nosotros, y que nos son los más queridos, aquellos a quienes confiamos nuestra felicidad, y nuestro buen nombre, pueden convertirse en traidores a la fe en ellos depositada. La reputación de un hombre puede venirse abajo con una acción poco meditada, y el dinero que un hombre posee lo puede perder todo, se le escapa quizá cuando más lo necesita. Las personas dispuestas a arrodillarse ante nosotros cuando tenemos éxito, pueden ser las primeras en lanzar la piedra de la malicia cuando el fracaso cierne su nube sobre nuestra cabeza. El único amigo carente de egoísmo de que dispone el hombre en este mundo egoísta, el único que nunca lo abandona, el único que nunca resulta ser desagradecido, ni falso, es su perro. El perro de un hombre permanecerá a su lado, en la prosperidad y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad. El perro dormirá en el frío suelo, donde soplan los vientos gélidos y la nieve azota con fuerza, solo por estar al lado de su amo. El perro besará la mano que no le ofrece comida alguna, lamerá las heridas y las llagas que le produce el roce con la dureza del mundo, y guardará el sueño de su amo cual si fuera un príncipe. Cuando todos los demás amigos se van, él permanece, cuando las riquezas emprenden el vuelo y la reputación se parte en mil añicos, el perro es tan constante en su amor como el propio sol en su eterno viaje por el firmamento. Si el cruel destino convirtiese a su amo en un apestado del mundo, sin amigos, sin hogar, y sin dinero, el fiel perro no pediría mayor privilegio que el de acompañarle, poder guardarle frente al peligro, y luchar contra sus enemigos. Y cuando la última escena sobrevenga, y la muerte se lleve a su amo, e introduzcan a su cuerpo inerte en la fría tierra, todos los demás amigos seguirán sin duda su camino, pero allí, junto a la tumba, permanecerá siempre vigilante el noble perro, con la cabeza entre las patas, y los ojos tristes, pero abiertos, en alerta espera, fiel, y verdadero, hasta en la misma muerte.